Un regreso marcado por la nostalgia y el gore

La nueva entrega de “Sé lo que hicisteis el último verano” retoma el espíritu de la película original de 1997: un grupo de jóvenes acomodados se ve acosado y asesinado por un misterioso vengador, vestido con impermeable y armado con un garfio de hielo. Incluso, el filme vuelve a contar con algunos de los actores principales del pasado.

“Es como volver a 1997. Es pura nostalgia”, afirma Freddie Prinze Jr., que repite su papel en esta versión. Sin embargo, Jennifer Love Hewitt, también presente en ambos repartos, responde: “La nostalgia está sobrevalorada”.

Entre el homenaje y la repetición

Al recrear fielmente la estructura del original —e incluso usando el mismo título—, esta nueva versión avanza con demasiada cautela y, al mismo tiempo, depende tanto del pasado que no logra desprenderse del todo de su sombra.

La historia vuelve a situarnos tras la graduación de un grupo de amigos (interpretados por Madelyn Cline, Chase Sui Wonders, Jonah Hauer-King, Sarah Pidgeon y Tyriq Withers), quienes provocan un fatal accidente de tráfico la noche del 4 de julio. Todos acuerdan guardar el secreto, pero un año después, alguien les acecha con la inquietante amenaza: “Sé lo que hicisteis el último verano”.

El legado de una saga eclipsada

Aunque esta franquicia nunca alcanzó el fenómeno de “Scream”, contribuyó a convertir en iconos a estrellas de la generación X como Prinze, Hewitt, Sarah Michelle Gellar y Ryan Phillippe. Su regreso resulta lógico, aunque la trama no termina de despegar hasta que los protagonistas originales hacen su aparición.

Resulta difícil empatizar con el grupo de jóvenes, criados en el lujoso entorno de Southport, Carolina del Norte —“los Hamptons del sur”—, cuya vida gira en torno al privilegio: conducen Volvos, toman Adderall, viven en yates y se alimentan de macarons. En este contexto, el espectador incluso podría desear que el asesino tenga éxito.

Nueva sangre y viejos supervivientes

El ritmo de la película recuerda más a un especial televisivo que a un thriller cinematográfico, y solo cobra fuerza cuando Hewitt y Prinze Jr. entran en escena, acudiendo en ayuda de los perseguidos. Como supervivientes de los sucesos de 1997, no dudan en advertir: “Id a por ellos antes de que os atrapen”.

Jennifer Kaytin Robinson dirige la cinta y comparte guion con Sam Lansky. Ambos combinan asesinatos brutales, escenas de impalamiento con arpón y cadáveres expuestos como trofeos de pesca con un humor sarcástico que apunta tanto a los anuncios de Nicole Kidman como a la fiebre por los pódcast de crímenes reales.

Crítica: la nostalgia no lo es todo

La resurrección de “Sé lo que hicisteis el último verano” se suma a la ola de reinicios de clásicos del terror como “Navidades negras”, “Candyman” y “Scream”, aunque aquí el material original ya era, en cierto modo, flojo.

Eso no quita que para muchos la cinta noventera sea un icono, impulsado en su momento por la presencia de actrices de moda como Hewitt y Sarah Michelle Gellar. La película original, ambientada en el brumoso pueblo pesquero de Southport, seguía a cuatro jóvenes perseguidos por un asesino tras un atropello con fuga. Fue un reflejo de la cultura juvenil de los noventa, aunque su ritmo y su energía resultaron algo planos para el género de psicópatas enmascarados.

Un nuevo verano de terror en Southport

Veintisiete años después de los acontecimientos originales, un nuevo grupo de amigos desencadena la furia de otro asesino tras un trágico incidente en carretera. Ava regresa a casa para la fiesta de compromiso de Danica, deseando recuperar la relación con Milo. Stevie, una amiga de clase trabajadora, se reintegra en el grupo, reemplazando al hijo de papá rico, Teddy, cuyo padre influyente encubrió el accidente mortal. El terror comienza en la despedida de soltera de Danica, cuando recibe una misteriosa nota y, poco después, su prometido Wyatt es asesinado brutalmente, desatando una ola de crímenes y la sospecha de que alguien conoce su secreto.

El asesinato de Wyatt marca el clímax en cuanto a originalidad. El resto de las muertes repiten secuencias del pasado, situando al asesino en viejas tiendas, cementerios brumosos y villas junto al agua. El ritmo del criminal sigue siendo lento, como en los noventa, y la tensión nunca termina de materializarse.

El trasfondo social y la memoria colectiva

La película añade un elemento interesante al abordar la gentrificación de Southport y cómo los crímenes del pasado aún pesan sobre la ciudad, afectando incluso a su economía y turismo. Sin embargo, esta idea apenas se explora, quedando en segundo plano frente a la acción principal.

En definitiva, “Sé lo que hicisteis el último verano” juega con la nostalgia, la violencia y el suspense, pero no consigue renovar realmente el mito ni emocionar más allá del homenaje a una generación que creció con los sustos de los noventa.